¿Por qué me mira así? – soltó.
Cinco palabras para un infarto.
El turista cayó al suelo como una piedra. La mujer huyó dejando a su esposo indefenso bajo el cuerpo que se inclinaba ante él. Este, al sentir la mano helada sobre su rostro, perdió el conocimiento.
En la puerta de entrada ella gritó buscando ayuda logrando llamar la atención de uno de los empleados.
- Tranquila señora, cálmese por favor - le dijo conciliador -. Es importante que no alarme al resto de visitantes de nuestro precioso museo de cera.
2 Respuestas:
A mí en su lugar me habría pasado lo mismo. Y eso que el de Madrid da miedo pero por lo mal hechas que están las estatuas.
Saludos
El de Madrid más que el de cera es el museo de los horrores.
Mi favorita es la de Rafa Nadal...
Un saludo.
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