El doctor nunca tuvo un diagnóstico tan claro.
Ser su propio paciente le hizo imposible tratarlo.
Parece que, de nuevo, pongo la cara... a ver qué os parece
El doctor nunca tuvo un diagnóstico tan claro.
Ser su propio paciente le hizo imposible tratarlo.
Parece que, de nuevo, pongo la cara... a ver qué os parece
7 Respuestas:
Nada resulta más difícil que curarnos a nosotros mismos, aún teniendo un diagnóstico claro...
Un beso.
PD: Fue un placer conocerte.
Vaya, saludable se te ve... Gracias por compartir.
Y sobre tu texto. Suele pasar así, tampoco las enfermeras pediátricas, cuando somos mamás, solo somos mamás -algo más preparadas, si-, pero muy mamás cuando vamos al ¡pediatra!
Abrazos,
Montse.
Síndrome del recomendado, le llaman...
Besicos
No te libras del yo, muchacho, por muy médico que seas. El poeta hace hablar al poema, no a él mismo. La vida se la dan las palabras. A ti lo más que te pueden dar es un premio sin valor, algo vano, pero, cuando te mueras, muerto estarás para siempre.
Claro que, para que alcances ciertos niveles de comprensión, hace falta una espiritualidad que no te puede dar ningún hospital, hijo mío de los fonendos.
Era el mejor cirujano conocido de todo el mundo y lo sabía. Tanto que no había otro capaz de llevar a cabo la operación que le salvaría de la muerte. Así que se armó de valor y sin anestesia ni nada cogió las pinzas y el bisturí y se abrió el orificio por el que continuaría su intervención.
El cirujano
El médico como paciente siempre ha sido motivo para elucubraciones varias...
... y supongo que lo mismo ocurrirá en todas aquellas profesiones que de vez en cuando se "muerdan la cola" como una pescadilla.
Un saludo.
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